martes, 29 de abril de 2008

Un adolecente toma el teléfono de su madre para robarle el crédito y transferirlo a su propio celular. No podría decirse que por coincidencia revisa los mensajes que su madre ha enviado y recibido, esas cosas no ocurren por vanas casualidades, no se si sea el destino o el mismo subconsciente de remitente o destinatario que tiende a manifestarse, de cualquier modo, la mierda siempre flota y el adolescente le descubre recados sexuales y de amor de un número que no es el de su padre.

Despierto al escuchar a lo lejos la palabra verga que creo que sonó en la televisión. Me pareció muy extraño escucharla a esta hora de la programación y ahora que me pongo a pensar, creo que nunca he escuchado “verga” ni en la más vulgar película de Alfonso Zayas. Conforme mi consciencia regresa del sueño, los sonidos empiezan a clarificarse y me resulta casi imposible que Bob Esponja (Pantalones cuadrados) diga “verga”. No, no viene de la televisión, la cortina de la ventana serpentea y parece gritar improperios y maldiciones con acento de sinaloense prepotente y bravucón, y entran a la habitación junto con el aire que apenas refresca la sofocada tarde. En la casa de atrás alguien eructa su coraje, es tanta su rabia que no cabe dentro de su cuerpo y la grita sin importar que todo el vecindario se entere. Los gritos salen con toda la fuerza de sus pulmones, y yo, recostado en la cama con los brazos detrás de la cabeza, trato de entender alguna razón de la violencia, pero solo escucho verga e hija de puta, pendeja y puta y lo que parecen ser golpes, golpes a uno mismo, el puño que se estrella contra la puerta hueca de madera, contra la pared, el puño que se estrella y se rompe en pedazos, pero el odio es más fuerte que el dolor y no se siente nada más que la necesidad de gritar tu alma lastimada para que todos alrededor se enteren de tu desgracia y se compadezcan por ti.

Uno de los mensajes decía algo como que esta libre de 11 a 3 y que si pasaba a echarse un rapidín. El joven sintió que de repente le hervía la sangre y se le subía a borbotones a la cabeza nublando su entendimiento. Siguió con los demás mensajes y todos eran de contenido similar, los leía automáticamente sin poder entender lo que realmente decían, solo veía palabras que le calaban a la altura de su pecho, en ese lugar donde dicen que se encuentra el alma. Los repasaba una y otra vez negándose a aceptar que su madre engañaba a su papá, que él era un hijo de puta.

Que puta es la ironía, a él y su hermano les gustaba echarle carrilla a su madre de que era amante del carnicero y que por eso siempre le daba los mejores cortes y kilos de a kilo y medio; y nunca imaginó que sus palabras pudieran haber sido ciertas, aunque no se trataba de un prospero carnicero sino de un vil repartidor de agua muerto de hambre. ¿Por qué con él? Piensa, hay miles de personas mejores que mi papá pero no un jodido repartidor de garrafones. Siente ganas de matarlo, pero un dejo de mesura lo lleva a marcarle al teléfono de su hermano y compartirle ese descubrimiento que no puede cargar sobre sus hombros.

El plan es hablarle para que lleve unos garrafones a la casa y ahí partirle la madre con un tubo galvanizado, después ya veremos, dice su hermano.

La mancha en el honor se lava con sangre, con sangre o con el perdón, pero es mejor la venganza. La redención probablemente sea el camino más sabio, el mejor moralmente, el bueno. Pero si quien te ofende es quien cimentó todos tus principios morales, quien durante la mayor parte de tu vida te enseñó lo que estaba bien y lo que estaba mal, que decía que todas las acciones que realizabas en este mundo aquí se quedaban, que todo se paga y que deberías tratar a los demás como a ti mismo, cuando te das cuenta de que todos tus pilares morales están hechos de una pila de mierda, de patrañas, de palabras huecas y todas esas pendejadas que se leen en los libros de metafísica, en la biblia, i-ching(atumadre) o no sé que fregados más. Entonces, durante un breve lapso de conciencia puedes asumirte como el león del karma, para ser la reacción física de esa acción que te tomó por las pelotas. Pero debes actuar rápido, porque a pesar de que la venganza es un plato que se sirve frío, hay que mantener las albóndigas calientes porque de lo contrario terminarás tragándote un caldo rancio e insípido, caduco; sin saber por qué chingados te estas comiendo esa porquería.

lunes, 28 de abril de 2008

El cielo se cubre de una mortaja de niebla e inunda todo con un olor a fogata, la muerte se respira en el aire, pero el sol nace una vez más irradiando unos visibles haces de luz como bandera naval japonesa y todo se ilumina de un extraño color naranja.
Horas antes en el centro médico que se encuentra en la avenida Washington y Chapultepec, un foco de 25 watts apenas alumbra una habitación de pardos muros, la familia llora alrededor de la cama donde yace, envuelto en una cobija como si fuera una momia, el cuerpo sin vida de mi tía Lupe. Antes era una gordita chaparrita bonachona con rostro de anciana prematura, pero ahora luce insignificante, diminuta, consumida por la enfermedad que le comió el cuerpo, sus hijos le acarician tiernamente su cara apagada, colmados de una profunda tristeza pura y sincera, de esa que no avergüenza, ni importa demostrar a los demás, de esa tristeza que se contagia; reconocen sus facciones con las yemas de los dedos como si todavía sintiera algo, como si quisieran reconocer en el tacto a quien fuera su madre y se negaran a aceptarlo. No te vayas mamá, sollozan en un llanto amarguísimo, no te vayas.
Un adolecente toma el teléfono de su madre para robarle el crédito y transferirlo a su propio celular. No podría decirse que por coincidencia revisa los mensajes que su madre ha enviado y recibido, esas cosas no ocurren por vanas casualidades, no se si sea el destino o el mismo subconsciente de remitente o destinatario que tiende a manifestarse, de cualquier modo, la mierda siempre flota y el adolescente le descubre recados sexuales y de amor de un número que no es el de su padre.
Mientras tanto, yo me ahogo en tequila y cerveza a varios kilómetros de distancia de donde Omar y Cedric vuelan las cubiertas cerebrales.
Frustración.

miércoles, 23 de abril de 2008

ESTA TEMPORADA HA SIDO COMO NAVIDAD PARA LOS ANTIAMERICANISTAS

¿QUIEN DIJO QUE NO HAY PASION EN EL AMERICA?



Aquí podemos ver las sobada (¿sobada? ¡Sobadota!) que le da el símbolo americanista German Villa o otro insigne socio aguila (que por cierto ya no van a ser las aguilas en la siguiente temporada, serán EL AVE FENIX, quesque porque van a renacer de las cenizas saaaabe), Salvador Cabañas.




Pichis bola de jotos la neta, ya entiendo porque pierden todos los partidos, PORQUE LES ENCANTA QUE SE LAS METAN.

miércoles, 16 de abril de 2008

Se acaba la papa, se acaba el maíz

… se acaba los mangos, se acaban los tomates


Foto Hartística

Algunas personas ;) por ahí andan rasgándose las vestiduras porque ya no van a sacar cartuchos para las cámaras Polaroid (digo, yo también me azoto durísimo pero por unas ondas metafísicas existenciales que no comprenderían [y no es tanto por pedos de dinero como deje entrever en el post pasado (el pedo fue que ese preciso día no traía los 5 baros para el camión, snif)]), digo, las polaroids están muy chingonas, así como con onda retro y se revelan solas, salen en las películas cuando alguien cool entrevista a unos gueyes y les saca instantáneas para anexarlas a una especie de expediente, son muy útiles para hacer fotos porno sin pasar por el penoso trámite de que quien las revelara viera encuerada a tu vieja (además había un mito urbano que decía que en los centros de revelado no te entregaban ese tipo de fotos, que se las quedaban), y en fin, se prestan mucho para la onda artística (ahista el No Code de Pear Jam con varias polas donde venían las letras en la parte trasera) pero siendo sinceros, todos o casi todos tuvimos una de estas cámaras y la usamos muuuuuuuy poco. Las razones pues son varias, la cámara es muy bromosa, que los rollos son muy caros o lo que quieras. Lo que si puedo decir es que las cámaras ahí estaban empolvándose y parafraseando a mi abuelita “lo que no se usa, a chingar a su madre”. Además, las cámaras digitales son mucho más chingonas (en aspectos tecnológicos y funcionales, ya se que en la onda artística, nostálgica, retro, kitch o lo que sea, no) y yo estoy a favor de las revoluciones, de destruir y reconstruir lo viejo y obsoleto para ir a otra parte (no digo hacia adelante, solo que las cosas se muevan a donde sea pero que se muevan) y de deshacerte de los tiliches que no sirven para nada.



…se acaban las ciruelas, se acaban melones

Apenas acababan de cumplir 14 años. Vivió rápido, murió joven y dejó un cuerpo hermoso

También en recientes días no sé si se enteraron de la desaparición de la revista La Mosca en la Pared. Cuando yo me enteré sentí culero, como con ganas de llorar, algo así como cuando se murió Kurt Cobian (¿así se escribe?) o Layne Staley (el de Alice in Chains), algo así pero tampoco tanto; ya tenía muchos años que no compraba la revista, sin embargo no tengo por que negar ni avergonzarme de que fui gran seguidor durante mucho tiempo.
Me gustaba ir a los puestos de revistar a hojear comics y excitar mi pilín con las portadas de las revistas pornográficas y fue entonces cuando la vi, me llamó la atención el diseño de su título, que Kurt Cobain (ya chequé el nombre, gracias) se revolcaba en el suelo atormentando su Fender y la textura del papel que parecía como de periódico pero a colores y mas brillocito, además, colaboraba José Agustín (creo que era la número 4) y otros batos que con el paso de los años fueron delineando mi gusto musical (Hamlet Ultrapeluche, Rogelio Garza, Erick “poncharelo” Estrada, Buba de José Quintero, Eusebio Ruvalcaba y las pachecoaventuras Armiados Güeva Vil); no utilicé la palabra “formarlo” porque con eso desacreditaría todo el esfuerzo que puse, y he puesto, para escuchar y descubrir por mí solito nuevos sonidos que me llegaran al corazón.
De hecho algo que me cagaba de esa revista era el Buzón de Mamá Mosca donde todos los que mandaban sus cartitas no tenían ni un gramo de sentido crítico y se volcaban en elogios a la revista por haberlos sacado de su ignorancia, como si estuvieran catequizando indios, y a la mejor sí lo hacían, pero pues no me gusta las poses aleccionadoras y no es que la revista la tomara, más bien los lectores se la enjaretaban, además otras cosas que me cagaban eran los artículos de Sergio Monsalvo, quien solo escribía de bandas que solo en casadesuputamadre los conocían (a la mejor si estaban chidos pero en aquellas épocas en el internet todavía no cuajaba chido y no había modo de averiguar) y la Patricia Peñaloza (la groupie más famosa de México) que escribía sus patoaventuras como si de un puto blog se tratara y finalmente las editoriales de Hugo García Michel con el que en pocas ocasiones estuve de acuerdo; en fin, las moscas vuelan sobre la cagada. En general se podría decir que debido a las anteriores cuestiones fue que dejé de comprar la revista.

Pero de ahí en más no tengo mucho que criticar, al contrario, atesoro la pila de revista que guardo junto a los discos en el mueble donde está mi estéreo. Y aquí aplica otro de los dichos de mi abuelita Pachita (porque así se llama mi abuelita, bueno, en realidad se llama Francisca pero le decimos Pachita de cariño) “Todo por servir se acaba” y al menos para mí la Mosca había acabado hacía tiempo, ahora compro la R & R (que vendría siendo como su sucesora) pero ya no soy tan fan como con la Mosca y solo me hago de los números donde salga algo que me interese en la portada.

Lo que si es que cuando me enteré de que había salido el último número corrí desesperado al puesto de revistas más cercano para comprar mi ejemplar, no quería quedarme sin una copia del final de una historia de la que siento que fui parte. Hoy, a un mes después de aquel día, todavía encuentro copias de ese último número de la Mosca en la Pared y siento tristeza porque a la mejor para el resto de las personas, la revista no significó tanto como para mí.

*Nótese que se evitó el uso de la palabra irreverente para describir el estilo de esta ahora legendaria revista.


…se acaba la sandía y se acaba el aguacate


Gigantic a big big love


Lo que si me agüitó culero fue la desaparición de la tiendas Gigante, chale, pinches Gigantes estaban chidos, ¿a poco no conocen a varios morritos a los que una de sus primeras palabras fue Gigante?

Gigante se convirtió en una definición genérica para describir las tiendas de automercado o superservicio o sepa la chingada, todas las tiendotas eran Gigante, la Comercial Mexicana, el Aurrera, el Wal-Mart a todas se les decía Gigante, algo así como el Pan Bimbo (como olvidar aquella puntada de Lalo [el de Lalo y Lagrimita] promocionando el Pan Bimbo Wonder). Además era la única que todavía utilizaba el sistema del porcentaje de descuento aplicado directamente al producto, y no se andaban con las mamadas de 30% de descuento en monedero electrónico o que en la compra de tal pendejada te dan nosecuantosputos puntos, o de plano hay tiendas donde te dejan ir todo el precio al costo, sin descuento y sin vaselina y además tienes que comprar un pinche paquetote que te durará para todo el año y no tienes ni donde guardarlo en tu casa.
Yo tengo varios buenos recuerdos (y uno malo porque me cacharon robándome unos M&Ms y pase una humillación publica de la que todavía me da pena acordarme), gran parte de mi colección musical fue adquirida en esa tienda cuando ponían todo el departamento de Discos al 50 por ciento de descuento. Ahí me compraron mi primer LP (el Thriller de Michael Jackson) y ahí compré también mi primer disco con mi propio dinero (el Soundtrack de La Bamba) y cuando estaba morrito iba a Gigante a comprar mis trompos y yoyos Duncan y agarraba los modelos más chingones y les cambiaba la calcomanía de los precios con las de los más baratos, y todavía más chiquito me gustaba separarme de mis papás para irme a jugar un ratillo con los juguetes y después jugar a encontrar a mis jefes en una especie de misión secreta.

Gigante, más por tu dinero, nunca te olvidaré y que chingue a su madre Wal-Mart que es como el Amierdica de los supermercados.



Total, como dijeron Al Gore y los Mayas, este pinche mundo calaca ya mero se va a acabar, lo bueno es que:


y la cosecha de mujeres, NUNCA SE ACABA...














la cosecha de mujeres, NUNCA SE ACABA...













todo lo demás se acaba, hasta este post

martes, 15 de abril de 2008

The Guanatos City Rocks goes Black

El vagabundo caminado por la calle con su ropa sucia de banqueta, su piel llena de costras de mugre y el cabello rastoso, camina despacio como lo haría un panda si los pandas caminaran en dos patas. Es realmente gordo y no sé por qué, se supone que esa gente solo traga lo que encuentra en la basura o Gansitos y Sabritas o algo así; carga equilibrando sobre su cabeza una ridículamente enorme bolsa con sus pertenencias y camina con esos pasos pequeños y monótonos, como un robot de juguete. Conforme me acerco puedo ver sus ojos que son de un color azul zarco y no denotan la ausencia, demencia o locura de la mayoría de los indigentes que deambulan por toda esta ciudad; al pasar junto a el un putazo de olor a mierda llega directo mi cerebro a través de mi nariz.

Necesito volver al psiquiatra, siento que no merezco nada de lo que tengo y ahí ando de pendejo privándome de cosas para auto castigarme. Quisiera dormir, dormir para siempre y escaparme de la realidad como lo hacía cuando estaba en la escuela. El otro día me llegó esa idea como una revelación en medio de una peda y sentí como el tremendo peso de una verdad personal me arrebataba toda mi borrachera, y toda esa festividad etílica se convirtió en una especie de amarga cruda, fue como haber despertado en medio de un carnaval. No me consuela ni siquiera que las Chivas hayan humillado al América. Necesito comprar otro control, pienso que las mujeres son mejores que los hombres y por eso me gustan tanto, me gusta la primavera porque las mujeres, como las la naturaleza, florecen y pocas cosas mejores hay que una vagina turgente como un botón que brota, me gusta también que ellas se vistan con pequeños shorts que casi dejan que se asomen los cachetes de las nalgas y lucir hermosas y alargadas piernas al caminar con tacones de aguja por el paseo Chapultepec, por fin pueden vestir como mujerzuelas sin que nadie diga nada, necesito ponerme a dieta ya que creo que toda esa falta de ambición busca satisfacerse a través del hambre de los sentidos, coger, tragar, cagar.

Me evadía sobre el sofá, acostado sin camisa, con la brisa del ventilador refrescando un cuerpo que ahora me parece amorfo y obsceno, necesito ir al gimnasio, bañado en sudor que hiede a exceso de testosterona, a almizcle, y el pinche calor intenso que quema las calles de Guadalajara y que brota distorsionando la visión, irradiando ondas calientes que agotan y roban tus energías provocándome ese deliciosa somnolencia como un pasón de mota; sumido en mis sueños, a mi nariz llegaban como oleaje de aire fresco, un aroma que encaminaba mis pensamientos inconscientes a mi infancia en Juchipila, a un olor a cerro o a baldío, un aroma a las flores de los árboles de limón o de naranjo y creía que era un sueño y que por eso me gustaría dormir eternamente y dejar un cuerpo joven que apenas ahora comienza su declive. Pero al despertar el olor seguía ahí, era el brote primaveral de una sábila que florecía.

Noche de insomnio, la mortificación de ser un pobre muerto de hambre me robaba el sueño, dejar ir las oportunidades como una manera estúpida de autoflagelarme, de joderme la vida, cambiando constantemente de posición en la cama, yendo de la cama al sofá, del sofá al piso, del piso a la cama, todo por la mortificación de no tener ni 5 pinches para el camión. Desperté en la madrugada y salía a caminar a por las calles todavía desiertas, después de estos últimos días en que el sol no había cedido y tostaba las pieles con la inclemencia de sus rayos, extrañamente hacía frío, soplaba un aire helado que arrastraba nubes del polvo, basura y mierda de la que está hecha esta ciudad, y hasta pude sentir algunas gotas de lluvia que despertaban un aroma a tierra mojada. Se suponía que había un sol naciente detrás de los nubarrones grises que bloqueaban el horizonte y me prometí no volver a pasar por esa situación otra vez, pero en mi vida he prometido muchas cosas que no he cumplido.

miércoles, 9 de abril de 2008

EMOFOBIA EN PUEBLETAROCK

Estaban un día unos gueys de Queretaro mergueandose a unos emos.


Lo que no se acordaban (puesto que Spiderman 3 estuvo medio madreada) era que Spidey (pa los compas) se había convertido en Emo


y entonces acudió al llamado de su tribu urbana
















Zónico: Oye Spidey, nomas que una de esas morritas en realidad es un morrito

martes, 8 de abril de 2008

Leer mientras escucho a My Bloody Valentine hace que todo parezca como más dramático

martes, 1 de abril de 2008

Southland Tales

Hasta le mandé un correo a mi exdealer de cine para ver que onda con Southland Tales, la segunda película de Richard Kelly, el mismo guey que escribió y realizó la notabilísima, Donnie Darko.



Después de una película del calibre del Donno Darkie era natural la inquietud por seguir los siguientes trabajos de su director; y cada vez que investigaba algo sobre ella, encontraba con que su fecha de estreno en Estados Unidos se había postergado (ni hablar aquí en México donde ni siquiera proyectaron las cintas del Grindhouse) y que los productores exigían que recortara su extensa duración, además que se habían preparado una serie de comics que precederían el estreno de la película.

Cuando por fin fue exhibida en el pasado festival de Cannes me enteré de que recibió abucheos y que hasta algunas personas habían abandonado la sala. “no creo que sea para tanto”, pensé, “además a esos eventos van puros mamomes que adoran pendejadas aburridas como las que hace Godadr, Kusturica o desos por el estilo”. Pero nada en concreto, en casi todos los sitios donde busqué solo encontraba la misma sinopsis que transcribo a continuación:

Los Ángeles (California), 4 de Julio de 2008. Durante tres días, la ciudad ha tenido que soportar la peor ola de calor de su historia. Los Estados Unidos se encuentran al borde de un abismo social, económico y ecológico. En Irak, la guerra continúa. Mientras, la vida de Boxer Santaros (La Roca, ¡Sí, LA ROCA! , el que era luchador), un héroe de filmes de acción aquejado de amnesia, se complica cuando se involucra con Krysta Now (Interpretada por Sarah Michelle Gellar, no te equivocas, la mismísima Buffy la Cazavampiros), una estrella del porno que sueña con tener su propio reality show, y David Clark ( Sean William Scott o mejor conocido como el hijo de la mama de Stifler en American Pie), un oficial de policía que posee las claves para develar una vasta conspiración.


“Chale, pues suena más o menos la historia (más o menos absurda) y además los actores están medio jodidos (es casi el mismo reparto de una película que quien sabe como se llama pero es una donde andan buscando un tesoro en la selva y es de las que dan el canal 7 [el 11 para los que son de Guadalajara] en los Sábados Apantallantes), pero, hey vamos, es el mismo guey que hizo Donnie Darko, además ahí hasta rescato la carrera de Patrick Swayze. Chín, pero también sale Justin Timberlake (aunque el El Gemir de la Serpiente Negra me cayó bien el jotillo), chingue a su puta madre, la voy a ver”, pensé y estuve buscándola hasta que hace como 3 mese me la topé pero la copia era de esas que se toman directamente del cine y no quise comprarla, después ya no la volví a encontrar hasta este fatídico fin de semana.



Creo que me olvidé comentarles que en la portada venía publicitada como “Un musical sobre el fin del mundo. Tengan un feliz Apocalipsis” Que pedo, ¿además es un musical? Para cuando me senté a verla mis expectativas ya estaban debajo de los suelos, la película comienza con un preludio donde se explica brevemente lo que pasa en los comics (que son los capítulos I al III, por lo que el filme comienza en el capítulo VI en una obvia referencia a cierta saga intergaláctica cuyo nombre no quiero acordarme): tronaron una bomba atómica en Estados Unidos que desató la Tercera Guerra Mundial y hay una crisis energética por lo que crearon una pendejada que obtiene la energía de la marea del… ejem… mar, y un montón de datos que a los 5 minutos ya me habían echo bolas (más o menos, ni si quiera son tan interesantes para logar que hasta el fan más aferrado de Donnie Darko se clave), total seguían pasando un montón de cosas combinadas en onda telenovela de televisa, grupos guerrilleros neomarxistas que pretenden chantajear al suegro de La Roca quien es un político (el suegro, no la Roca, La Roca es un actor que se perdió en el desierto y regresó con amnesia y que quien sabe por qué todo el mundo hace tanto mitote) con un video porno que resulta que siempre no es un video porno sino el de un asesinato; el Stifler que es policía y el otro Stifler que vino del futuro (claro que eso se “explica” hasta el final) y por fin llega el tan temido primer tema por el que se dice que la película es un musical: La Roca moviendo los dedos nerviosamente provocándome un chingo de pena ajena, escapando de la escena de un crimen, envuelto en una extraña bruma producida por el generador de pulsaciones electromagnéticas mientras suena Wave of Mutilatión. Bueno, por fin algo chingón.





En Donnie Darko ya se había mostrado la capacidad de Kelly por escoger canciones chingonas (Tears for Fears, Joy Division, Echo and the Bunnymen)y la verdad, lo único bueno de Southland Tales son los temas musicales, el Justin Timberlake que se avienta el karaoke de All the Things That I’ve Done con la camisa toda ensangrentada (quien sabe por qué) y una viejas bailando en coreografía, y casi al final, en una fiesta muy pipiris nais donde se estrena un zepellin que funciona con la energía dinamomagnética y que los neo marxistas quieren destruir por representar el símbolo del capitalismo y la burguesía, se avientan con la de HOWL de los B.R.M.C., además que los créditos finales cierran con Tender de Blur después de un final que no se entiende muy bien y lo peor de todo es que NO TE IMPORTA porque lo único en que piensas es en que qué bueno que por fin terminó y que qué chingón tocaba Blur.




Es como meter a David Lynch (no es gratis su mención, hay varias veces que se siente algo de su influencia), la biblia, buenas canciones, viajes en el tiempo, actores de culto (Kevin Smith, El guey que la hacia de “Moco” en La Revancha de los Nerds, la viejita chaparrita psíquica de Juegos Diabolicos, John Lovitz el de Saturday Night Live y Chirstopher Lambert mejor conocido por su papel como Connor MacLeod en las películas de Higlander), la cuarta dimensión, Donnie Darko, drogas sintéticas, dosis de humor involuntario y efectos especiales medio corrientes, en una licuadora. Neta, todo al mismo tiempo, ya sabrán.




Se nota que Richard Kelly quiso hacer algo demasiado grande (y pretencioso) pero le salió, muy, muy mal y como que al final le dio gueva que cuajara bien todo el pedo. Como si con todos esos elementos se fuera a crear un culto como el generado alrededor de Donnie Darko; pero la verdad encuentro muy difícil a alguien que se interese en leer las 300 hojas de los comics o procesar toda la información que se muestra a lo largo de la cinta para relacionarla y tratar de explicar de lo que trata la película que a final de cuentas es sobre que el fin del mundo es algo personal que ocurre cuando uno se muere (chale, hasta el final es el mismo que en Donnie Darko).


En fin, lo bueno es que al parecer Richard Kelly ya le valió verga Sauthland Tales porque por ahí escuché que esta echandole los guevos a una nueva peli llamada The Box donde sale Cameron Diaz y el Ciclope de X-men (:S) A ver que pedo.


Picate en la cola, digo en las palabras y dale “guardar como” para bajarte estas preciosas melodías


Calificación: No aguanta ni pa verla pacheco

Epilogo: A pesar de que según eso Buffy es una estrella porno, lo más que enseña son las piernas porque ni siquiera los calzones se le ven, asi que si la película te interesó por eso, pues tampoco.