lunes, 19 de enero de 2009

5 añotes

Fin de semana que pintaba ser tranquilo, el viernes, unas ligeras cervezas en una casona antigua por la zona de Chapultepec en donde supuestamente se aparece una mujer fantasma. Yo no creo en esas cosas y realmente me gustaría ver a un fantasma alguna vez; supuestamente se ven como personas normales que te dejan una extraña sensación y una vez que te pones a investigar te das cuenta de que son un fantasma, es decir, no puedes decir “estoy frente a un fantasma” sino que te das cuenta demasiado tarde para comprobarlo. La casa donde está el pequeño café está muy chingona y la atienden sus dueños, un par de bohemios artistas que son buena onda y tienen acondicionado una parte de su hogar para el café, lo chingón es que los muebles son muy antiguos también y la onda básicamente es sentarse en su sala a pistiar y puedes poner la música de tu ipod y no hay pedo, las paredes están repletas de cuadros con fotografías de James Dean y las instalaciones eléctricas son tan antiguas que seguido se está bajando el voltaje de la luz.

Saliendo temprano de ahí me fui al cine a ver El Extraño caso de Benjamín Botones, una muy bonita película de estilo clásico Hollywoodense que ofrece no más ni menos que lo que los cortos y la sinopsis describe, la historia de un guey que nace viejito y va rejuveneciendo conforme pasan los años. Tal vez la película tenga algún mensaje o idea que quiere transmitir acerca del paso del tiempo y como la edad ésta en nuestra mente o algo así, las cinta tampoco se presta para sesudas reflexiones, sino que a pesar del extenso metraje se disfruta de principio a fin, y todavía más por las mujeres que salen siendo unas pedófilas y gerontófilas al mismo tiempo por el taco de ojo que se dan con las distintas facetas de Brad Pitt.

Saliendo del cine era demasiado tarde como para hacer otra cosa y demasiado temprano para irse a dormir, así que fui por unas chelas al Pony pero había demasiada gente esperando entrar y como siempre hay un montón de lugares a los digo “ahh algún día hay que ir ahí” pero nunca voy y siempre termino en los mismos lugares de diario, ese día si fue diferente ya que fui a una cervecería onda alemana por Pedro Moreno y Américas, que la neta no sé como se llama pero seguido hay una combi pintada como la bandera alemana afuera de ahí, donde nos chingamos unos pretzelotes acompañados por cerveza de la casa la cual estaba bastante buena pero se me hizo que le faltaba gas o no sé si así era tipo de cerveza. Nos corrieron temprano de ahí y picados fuimos a la penca para recargarnos, no sin antes pasar a ver a los travestis de plaza del sol.

El sábado desperté temprano y sin cruda, ahhh que bien se siente, y fui a desayunar unos exquisitos tacos de alambre que están enfrente de las farmacias Guadalajara de López Mateos y Manuel Acuña, nomás que medio caros, pero bueno, después al partido de fútbol, todo motivado por el triunfo de la semana anterior y luego justo cuando comenzaba el partido alcancé a escuchar una rola de The Verve que sonaba en restaurant así que estaba seguro que íbamos a ganar pero luego luego cayó el gol en nuestra contra, como que todavía estábamos fríos pero nos sirvió para despertar y meternos al partido, así que conseguimos el empate al poco tiempo, el resto del primer tiempo tuvimos al rival encima pero pudimos contenerlos eficazmente. Ahora he estado jugando de lateral y como que ya le estoy agarrando la onda a la posición, yo siempre había estado acostumbrado a jugar por el centro y debutando en la posición me solía perder y regalar espacios, pero como dije estoy agarrando la onda y básicamente es que no hay pedo entregar la banda, lo que sí es que cuando el delantero comienza a correr la diagonar, anticiparlo con un par de metros y meterle duro la pata, pero para el segundo tiempo hicimos movimientos tácticos porque estábamos muy encerrados atrás y buscábamos ofender pero el equipo realmente se perdió y el buen trabajo defensivo valió merga, además los rivales eran puros morrillos de alrededor de 20 años que no se caían ni aunque sacaras el hacha y por pendejas individuales terminamos perdiendo como 4-1 o 5, no sé, después de 3 goles la verdad es que yo ya dejo de contar. Al menos yo sentí que jugué bien (en la medida de lo posible pues).

Por la tarde fui a un cumpleaños al Atlas Chapalita. Pinches margaritos como me caen gordos, me hubiera gustado llegar con una playera de las Chivas nomás para que todos se me quedaran mirando, incómodos y con cara de envidia, pero pues ni modo de llegar a un cumpleaños con una playera de las chivas, eso sí estaría super naco la neta. Había whisky para pistiar pero después de lo que me paso en año nuevo la verdad es que no me dan ganas de entrarle y como no había chelas me la pase con pura coca-cola. La comida estuvo rica y variada y después me fui un rato a dar la vuelta para ver a las lolitas asoleándose en la alberca del club. Por la noche tenía más sueño que la chingada y según yo me iba a dormir temprano pero en el canal 5 estaban dando Land of the Dead y pues ni modo de perdérmela así que terminé durmiéndome tarde como diario.

El domingo fui al Tianguis del Sol a comprar un juego porque ya he terminado todos los que tengo (el último fue el Call of Duty Word at War, tsssss está bien chingón) pero la verdad ninguno me llamaba la atención así que me decidí por el de Guitar Hero Wold Tour a pesar de que el Legends of Rock ya me tenía hasta la madre y la verdad ya había olvidado lo entretenido y adictivo que es y de no ser porque ya había quedado de ir con el Choco de ir a su casa a una carne asada me la hubiera pasado todo el día jugando, de hecho ya quiero que pasen las horas para seguir rockeando en mi casa.

Por cierto, este blog cumple hoy un lustro de que su primer vio la luz su primer post el cual decía lo siguiente:

“¿Ehhhh??

¿Donde estoy????

¿Blog????

Esa palabra se parece al sonido del vomito que sale de mi boca y cae junto a tu mesa mientras comes pollo empanizado.

¡Saquenme de aqui!!!!”

Lo anterior estuvo inspirado en un niño que se aventó una copiosa guacareada en un Kentucky Fried Chicken. La verdad es que no tengo ganas de escribir todo lo que ha significado este blog para mí durante tantos años, tampoco tengo ganas de hacer un recuento de los mejores post ni una descripción estadística de todas las veces que han visitado esta página el número de post que llevo o cuáles son los que me han dejado la mayor cantidad de comentarios, lo que sí me hubiera gustado es cambiarle el template para cambiarle algo pues, pero la nueva versión de blogger beta no me termina de convencer del todo y básicamente se debe a que no me da chance de poner esos balazos que suelo poner debajo del banner, aunque sea le hubiera cambiado el banner pero los que hice no me terminaron por convencer y el del cholillo se me sigue haciendo chido, así que hoy, a cinco años de la creación de Guanatos City Rocks On Line no celebramos nada, al igual que yo que soy un amargado este blog también se amarga y se limita a contar las trivialidades que me ocurrieron el fin de semana. También tenía pensado cambiarle de nombre a Guanatos City Blues

Te quiero mucho blog.

SALUDOS AL TAPATÍO DONDE QUIERA QUE ESTÉS



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